martes, 16 de diciembre de 2008

Ruy, el Pequeño Cid

Argumento: narra las aventuras y hazañas del Cid Campeador cuando todavía era un niño que soñaba con llegar a ser un gran caballero al servicio del Rey. Ruy, junto a su burra Peka, correrá diversas andanzas que le harán darse cuenta de cuáles son los atributos que debe tener un buen caballero.


ANÁLISIS DE RUY, EL PEQUEÑO CID

Dartacán y los Tres Mosqueperros

Argumento: visión canina del clásico de Alejandro Dumas donde encontramos al joven Dartacán que aspira a ser mosqueperro y que tendrá que ayudar a la reina junto a sus amigos, los tres mosqueperros, para acabar con las intrigas del cardenal Richelieu.

ANALISIS DE DARTACÁN Y LOS TRES MOSQUEPERROS




Lo mejor:

la historia de la Reina y de los arretes.
El último capítulo cierra la serie magníficamente.
No muere ningún personaje, pero todos reciben al final lo que se merecen.
Dartacán es nombrado mosquetero cuando realmente lo merece y no después del asunto de los arretes (no estaba cualificado) ni mucho menos cuando Pom y los mosqueperros hacen trampas para que gane al resto de aspirantes (hubiera sido indigno).
La correlación entre el segundo capítulo y el último.Lo peor:
El exceso de protagonismo de Pom, que es un personaje que se incorpora en el capitulo 13.
La trama forzada de los capítulos de relleno que no vienen a cuento (especialmente el capítulo del sueño de Dartacán, que es estúpido e infumable).

Para recordar:

El sentido del honor de Rochefort en el último capítulo y el momento en el que Dartacán le da el ungüento de su madre.
El dibujo de Amis (¡qué majico!)
El capítulo donde el señor de Treville sale de “maniobras”.
Pontos haciéndose pasar por el conde de Rochefort.
Lo más:

Ridículo: Widimer disfrazado de mujer detenido por su propia guardia.
Valiente: Juliet escapando ella sola de la cabaña donde la dejó Rochefort.
Casi dio miedo: la expresión de la cara del señor Dartacán cuando le enseñaba a su hijo el manejo de la espada bajo la lluvia (daba miedo).
Estúpido: el capítulo del sueño en la isla.
Deshonroso: los mosqueperros hicieron trampas para que Dartacán ganara el puesto de mosqueperro.
Hipócrita: que los duelos estuvieran prohibidos.
Infantil: Milady corriendo como un gato.
Lamentable: todos los palos y desventuras que sufrió Dartacán en su camino y llegada a París.
El mejor caracterizado: Richelieu.
El mejor dibujo: Amis y el conde de Rochefort.
La mejor frase: “¿Widimer sacando una espada? Pero si Widimer siempre saca la pistola” (Pontos) y “Cuando derrotan a tu guardia no se ríen de ellos, Widimer, se ríen de mí” (Richelieu).
Fuera de lugar: tanto secretismo del duque de Buckingham que no caminaba abiertamente por París, para que al final, con los arretes lo viéramos corriendo por medio París.
El personaje más tuta pomposo: Luis XIII.
Lo más elegante: la reina bailando y girando sobre su minúscula cintura.
Lo menos elegante: la reina dando sillazos a Dartacán cunado estaba hipnotizado. La novia de Amis arañando a Widimer por interrumpirles.
La mayor incógnita: ¿qué pasó con el señor de Bonacieux? ¿Será “botarate” el nombre del criado de Rochefort?
Lo más oportuno: la llegada de Treville fingiendo estar de maniobras cuando la guardia del Cardenal iba a matar a Dartacán y a los mosqueperros. Widimer descansando justo en la entrada al pasadizo al castillo.
La peor filosofía: sacaban la espada demasiado rápido por nada.
Conmovedor: Rochefort clava la espada en el suelo porque siente que está deshonrada y Dartacán el da el ungüento.
El elemento primordial: el ungünto de la madre de Dartacán.

Definiendo:

Dartacán: la valentía.
Amis: el caballero, el apuesto, el galán.
Pontos: el cabal.
Dogos: el fortachón.
Juliet: la escurridiza.
Pom: el descarado.
Treville: el competente, el responsable.
Cardenal Richelieu: el cismático, las tramas.
Widimer: el cobarde, el incompetente.
Milady: la conspiradora, la que juega sucio.
Conde de Rochefort: la xclase, la distinción, el que mira por encima del hombre… pero con más honor que el resto. El que sabe rectificar a tiempo.
Luis XIII: elpomposo, el amanerado, el “no se entera de nada” (o no se quiere enterar…).
Ana: la que gobierna.
Duque de Buckingham: el educado.
Planchet: un buenazo.


La amistad y el honor:

La serie comienza en los títulos de crédito indicando que trata del valor de la amistad y del honor. La amistad se perfila en que los mosqueperros toman el problema de uno como si fuera de todos; pero el honor de Dartacán se sacrificó en pos de la amistad cuando Amis, Pontos, Dogos y el propio Pom deciden hacer trampas en las pruebas de admisión para que Dartacán cumpla su sueño de ser mosqueperro. Aquí se queja Richelieu y con razón.

Correlativo a este asunto está la cuestión de honor que tiene pendiente Dartacán con Rochefort desde el capítulo 2 y que se resuelve en el último. En el capítulo 2, Rochefort considera a Dartacán un provinciano y no ve mal el método a garrotazo limpio que le dan el criado y el posadero. Pero al principio no lo dejo pasar porque se lo toma como una ofensa personal y ambos comienzan a batirse hasta la llegad de Milady, donde Rochefort abandona el combate. Dartacán intenta batirse posteriormente con él sin conseguirlo, Rochefort no lo considera un rival digno para él. Dartacán utiliza el ungüento de su madre para curar sus heridas.

En otro momento de la serie vemos que cuando el honor de un caballero se pierde en combate la espada queda deshonrada y no vuelve a utilizarla.

En el último capítulo, Rochefort ha cambiado su visión respecto a Dartacán y ya lo ve como a un caballero (rival digno de enfrentarse con él), por eso no aprueba que Widimer quiera envenenarlo, él piensa que “no es una muerte digna para un caballero” (ya no es un provinciano) y avisa a Dartacán para batirse con él y par advertirle del veneno de Widimer.
Lo de Widimer no sorprende, pues no tiene honor, siempre utiliza la pistola para estar en superioridad. Pero ahora es Milady quien va a utilizar la pistola contra Dartacán, pese a la prohibición de Rochefort para que no intervenga.

Rochefort y Dartacán se baten en un duelo de igual a igual, pero este duelo, al igual que el del segundo capítulo, es nuevamente interrumpido por Milady cuando tratando de matar a Dartacán alcanza a Rochefort en el brazo. Dartacán acusa a Rochefort de no ser un caballero, a lo que éste replica que le había dicho a Milady que no interviniera, pero Rochefort se siente deshonrado y clava en el suelo la espada que no volverá a utilizar. Ahora se produce el hecho más emotivo de la serie: Dartacán le ofrece a Rochefort el ungüento de su madre (el que curó sus heridas en el segundo capítulo), Rochefort se sorprende, pero lo acepta agradecido.

Ahora nuevamente proponen de mosquetero a Dartacán y Richelieu evade su responsabilidad estratégicamente delegando su voto a Rochefort, y ahora se produce el momento más gracioso de la serie: ver la expresión y las orejas de Richelieu cuando Rochefort no sólo da su aprobación al nombramiento de Dartacán sino que felicita al rey por la elección. Dartacán es nombrado mosqueperro no cuando le faltaba cualificación (tras los arretes) ni cuando hacen trampas, sino cuando se ha ganado el respeto de su adversario (no cuando lo ha matado ni derrotado, sino cuando lo considera digno). Éstos son los detalles por los que unas series valen más que otras.